Sepia...
y blanco y negro...
Viejos patios en damero con aljibes, vitrinas con todo tipo de botellones y bártulos varios. Reminicencias de juegos de la infancia... ese tango de antaño (la ñata contra el vidrio). Cafés, charlas interminables, bares con aroma a molinillo de bronce recién usado, las librerías "de viejos" de la calle Corrientes. Buenos Aires... mi alambique. Tus calles destilan lo mejor de mí en estos tiempos de derrumbe físico, intelectual y moral donde se han perdido las buenas costumbres y modales, ganando lugar los desastres ecológicos; donde las políticas sociales son cada vez más endebles al desmoronamiento, por donde quiera que se las mire, en cualquier lugar del globo...
Donde quiera que se encuentren leyendóme, locales y visitantes, les regalo un ejercicio invitándolos a dejarse envolver por tan solo un instante, lejos de la vorágine, por el cálido vapor que recorre el alambique desprendiendo la esencia misma de las cosas, de ustedes mismos, en este caso. Buenos Aires es mi alambique. ¿Me informan si existen otros?
8 comentarios:
El mío son unos montes envueltos en la niebla, tal vez ya te hayas dado cuenta. Pero un día he de ir a Buenos Aires y recorrerlo de café en café, casi sin tocar la calle, solo viendola pasar al otro lado de los ventanales.
Qué hermosa serie: cada imagen daría para una entrada propia. Pero si he de quedarme en alguna me quedo en la última: este gesto, aquella figura, esa bandeja, aquella pareja y toda la luz del mundo.
Excelente série. Captaste uns ambientes fantásticos.
Me gusta el patio y el resto de las fotografías de tu Buenos Aires.
Un día espero verlo en directo.
J.
Tus imágenes me han transportado a esos tiempos en los que las pequeñas cosas tenían importancia. Otros tiempos, aquellos de sabor, aroma y luz. Que bien transmiten tus fotografías ... sensaciones y recuerdos. No puedo elegir, todas son magníficas. Lo que si puedo elegir, es su luz.
Hay ciudades que tienen ese encanto, cada vez más escondido, y donde aún se pueden disfrutar las horas apaciblemente. Buenos Aires, sin duda es una de ellas. Que gratos recuerdos, maravillas puras, guardo de nuestra visita.
Yo añadiría, si me lo permites, dentro de lo que conozco, la ciudad de San Cristóbal de las Casas en Méjico, Victoria en Canadá, y dentro de España, me quedo con esos rincones inconfundibles, llenos de sabor, de la ciudad de la Laguna en la isla de Tenerife (islas Canarias).
Gracias por invitarme a recordar, nada mejor para comenzar un buen fin de semana
un abrazo
Lu
Fíjate que salvo la primera foto, todas las demás coinciden con la idea e imagen que siempre he tenido de Buenos Aires.
En lo que respecta a la primera foto, bien podría corresponder a algún rincón de México; esos patios interiores, tan de nuestra herencia colonial
Un beso querida y buen fin de semana
Me has dejado un poso de tardes y melancolía, de juegos mientras llueve, de cafés, libros y charlas en silencio.
Un abrazo, Lu
(precisamente esta tarde nos vamos a nuestro alambique preferido, el Teide, majestuoso y sereno)
Mi alambique está en un campo abierto bajo una noche febril de estrellas giratorias... Pero me encanta disfrazarme de humeante café, resuello de bandoneón o lluvia transparente. Todo y nada. Cualquier esquina diminuta puede ser un abismo y conducirnos al otro lado del espejo.
Desde la infancia sueño con el Buenos Aires que mi abuelo dibujaba para mí. Gracias por tender ese puente que me ha hecho recorrer las calles de mi imaginación
Estupendas!
La verdad es que me da añoranza , tienen mucho encanto.
Me gusta mucho la imagen de la vitrina... y lo que cuentas: "Cafés, charlas interminables, bares con aroma a molinillo de bronce recién usado, las librerías "de viejos" de la calle Corrientes"; el modo en que lo dices. Dan verdaderas ganas de estar ahí ^_^
Me encantaría visitar Argentina alguna vez. Estoy convencida de que me iba a encantar.
Hola Lu, acaá estoy. Te "linko" desde casa, ok?
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